jueves, 12 de octubre de 2017

Españoles en el Día D

Manuel Otero Martínez, con apenas 28, fue un español que participó en el desembarco de Normandía, junto a los aliados, el 6 de junio de 1944. Allí dejó su vida en una acción heroica que sirvió para acabar con las alambradas que separaban la playa de los búnkers nazis.

Manuel nació en Serra de Outes, A Coruña en 1916. Trabajó como marinero en el barco carbonero "Inocencio Figaredo" que realizaba la ruta entre Asturias y el Mediterráneo. Al comenzar la Guerra Civil Española el barco fue requisado por la república para el traslado de pertrechos desde Rusia a España, pero debido al conflicto, el navío se quedó en el puerto soviético de Odessa y la tripulación fue a parar a un campo de concentración que compartieron con miembros de la División Azul, muy cerca del círculo polar ártico. En 1952 volvieron repatriados España.

El joven Otero no se encontraba entre la tripulación enviada a Rusia. Se quedó en España y fue herido en la batalla de Brunete. Lo trasladaron a un hospital de Valencia y posteriormente a Barcelona. Volvió a trabajar como marinero y dos años después consiguió un trabajo en un barco que abandonó cuando llegó a Hawaii para posteriormente afincarse en Nueva York, donde decidió quedarse ilegalmente en los Estados Unidos.

La situación de ciudadano ilegal era arriesgada y los Estados Unidos habían entrado en guerra tras el ataque japonés a Pearl Harbor, en diciembre de 1941, así que en 1943, decidió alistarse en el ejército para obtener la nacionalidad, y además le pagarían los estudios. Como luchó en la Guerra Civil, tenía experiencia en combate fue destinado a la compañía A (Able) del 1er batallón del 16º regimiento de la Primera División de Infantería, la famosa "Big Red One".

Tras la instrucción fue enviado a Inglaterra, donde su unidad se está preparando para el asalto a las costas de Normandía, como reemplazo, con el grado de soldado de primera clase. El 6 de junio de 1944 participó en el asalto de Playa Omaha pero no en una lancha de desembarco LCVP (Lancha de Desembarco de Vehículos y Personal) Desembarcó en una mayor, posiblemente una LCI (L), (Lancha de Desembarco de Infantería (Grande)) fuera de la zona prevista, por culpa de las corrientes.

Tras los primeros estragos producidos por las ametralladoras alemanas, Otero y dos compañeros más, llegaron a las alambradas que impedían el acceso a los búnkeres desde donde les disparaban. Tomaron unos torpedos bangalore y los deslizaron a través de los alambres de espino haciéndolos volar por los aires y dejando vía libre al resto de la unidad. Los tres soldados avanzaron y unos pocos metros más allá murieron por la explosión de una mina. Por ello recibieron el Corazón Púrpura.

Esta historia la conocemos gracias a una sobrina del soldado, que tenía en casa el féretro militar, de madera forrado de cinc con su número de identificación, el 32868826, con sus pertenecías, que puso sobre la pista al escritor Antonio Osende, que tras dos años de investigación ha podido contar la historia de Manuel Otero en su libro "Día D, Normandía, 6 de junio de 1944. Manuel Otero Martinez: Un gallego en Omaha Beach".

El 6 de junio de 2014 la Asociación Histórico Cultural The Royal Green Jackets, a la que pertenece Antonio Osende, le rindió homenaje frente a su tumba del cementerio de su pueblo natal, donde está enterrado con la bandera de Estados Unidos. Su cuerpo llegó hasta su pueblo desde el cementerio militar de Colleville gracias la Cruz Roja Internacional, acompañado por miembros del ejercito norteamericano y de su embajada en España.

Según información del investigador e historiador Pepe Conchado aparecida en el diario coruñés La Opinión, Manuel Otero no es el único gallego que participó en el Día D. Andrés Pereiro García, tambien desembarcó en Normandía con el 116º Regimiento de la 29ª División de Infantería Americana que debía llegar a Pointe du Hoc, como refuerzo de los Rangers que tomaron la posición. Murió, con solo 20 años, tras caer herido en La Trinité, cerca de Brest.

En la cruz de Andrés Pereiro, en la parcela H, fila 8, tumba 8 del cementerio de Saint James, se dice que murió el 1 de septiembre de 1944 pero en los registros norteamericanos figura que falleció el 1 de agosto. Andrés Pereiro nació el 6 de marzo de 1923 en Xoez. Recibió el Corazón Púrpura.

Investigaciones de la Asociación Sancho de Beurko Elkartea, han logrado identificar a casi cincuenta soldados de 1ª y 2ª generación de vascos que emigraron a los EE.UU. y Gran Bretaña. Algunos de ellos son Frank Agerrebere, Steve Larrinaga, Santioago Mendieta o Lucio Sauquillo Etxebarria que está enterrado en el cementerio cementerio británico de Hermanville.

Otro español que participó en las operaciones del Día D es el turolense Abilio Marqués León, que saltó en Normandía como parte de la compañía B (Baker), 506º Regimiento Paracaidista de la 101ª División Aerotransportada. Marqués abandonó su pueblo, Albentosa, en plena Guerra Civil, para marcharse a Estados Unidos. Tras el ataque a Pearl Harbor se alistó al ejército.
Tras Normandía su compañía participó en la Operación Market Garden: allí sufre heridas de metralla en el pecho. Después de recuperarse de sus heridas volvió al frente en Bélgica, a los bosques de las Ardenas en donde padeció congelación en los pies. Trasladado a Inglaterra, le llegó el fin de la guerra.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario