Las palomas mensajeras fueron utilizadas desde antiguo como medio de comunicación y durante la Segunda Guerra Mundial las utilizaron tanto los Aliados como las tropas del Eje. De hecho las primeras noticias del Día D las llevó una paloma de la RAF llamada Gustav. Gustav fue una de las 250.000 palomas que usó el ejército británico durante la guerra.
El partido nazi había tomado el control de todos los palomares en Alemania después de que llegara al poder. Himmler, que al parecer era aficionado a las palomas, había ordenado su uso en la policía de seguridad.


Se desconoce el número real de palomas abatidas por los halcones alemanes pero solo pudieron regresar a Gran Bretaña 1800 de las más de 16000 enviadas a los territorios ocupados, desde Copenhague a Burdeos, a pesar de que en muchas ocasiones el mismo mensaje era trasportados por dos o tres palomas para que al menos una de ellas llegara a su destino.
Para intentar evitar tal desastre, el MI5 organizó una unidad con la orden de recorrer la costa del Sur de Inglaterra matando a todos los halcones. Pero, como le sucedió a los alemanes, no resultó eficaz. Mataban tanto aves aliadas como enemigas. Finalmente se optó por el mismo método que el enemigo, usar halcones para cazar a las rapaces alemanas y a las palomas que enviaban desde Francia para confundir a los servicios secretos aliados.
Una vez que Francia fue liberada y la guerra se acercaba a su fin, la guerra de los pájaros también terminó.
No se sabe si algún halcón alemán recibió su Cruz de Hierro, pero entre las palomas aliadas, 32 de ellas recibieron la Medalla Dickin por su servicio.
Los soviéticos también tuvieron su "guerra aérea" particular con los alemanes. Además del uso de las palomas como mensajeras también las intentó utilizar para atacar a los aviones enemigos.
Desde los años 20 se desarrollaron varios trabajos con las palomas y en 1929 se crearon las unidades de palomas en el ejercito rojo. Ya en 1936, la Unión Soviética contaba con más de 250 estaciones con 30.000 mil palomas. Estos puestos se mostraron fundamentales, por ejemplo, durante la batalla de Moscú.
Como en el caso de los perros entrenados para destruir los tanques alemanes se recurrió a las palomas.
Eran las "palomas-proyectil". Estas, que portaban unidos a sus cuerpos explosivos activados por presión, tendrían que posarse sobre las bombas de las alas de los aviones alemanes. Teóricamente, el explosivo se soltaría de la paloma para que esta pudiera volver a su puesto en tierra. Después se activaría el explosivo. Pero el proyecto se abandonó al igual que el de los perros bomba pues las palomas no serían capaces de distinguir aviones enemigos o propios.
Por cierto. Valiant, el héroe de la película de animación, se llama así por la última paloma que logra llevar un mensaje de auxilio del comandante francés que defendía Fort de Vaux asediado por el fuego artillero y de gases tóxicos lanzados por los alemanes durante la batalla de Verdún, en 1916. Valiant murió nada más llegar a su destino.
Para saber más:
Secret Pigeon Service: Operation Columba, Resistance and the Struggle to Liberate Europe, de Gordon Corera
ABC
HistoryNet
Belleville News-Democrat
BBC
The Telegraph
Para saber más:
Secret Pigeon Service: Operation Columba, Resistance and the Struggle to Liberate Europe, de Gordon Corera
ABC
HistoryNet
Belleville News-Democrat
BBC
The Telegraph
No hay comentarios:
Publicar un comentario