viernes, 17 de noviembre de 2017

Vudú para acabar con Hitler

Adolf Hitler sufrió varios intentos de asesinato, pero ninguno tan estrafalario como el ocurrido el 22 de enero de 1941 cuando un grupo de personas se reunieron en una cabaña aislada en los bosques del estado de Maryland (EEUU) con la ayuda de la magia del vudú. En esa fecha los Estados Unidos aún no habían entrado en guerra contra el Eje.
La ceremonia consistía fundamentalmente en clavarle estacas en el corazón a un maniquí que representaba al dictador alemán, estacas en la garganta, y clavos en los ojos para causarle insomnio.


En el ritual incluían huesos de pollo como un “símbolo de hambre”. Un exorcista se hizo cargo de conducir la ceremonia que comenzó cuando le dijo al maniquí:
Tú eres Hitler, Hitler eres tú. Que los males que te hagamos, también vaya a el. Hitler, eres el enemigo del hombre y del mundo, por lo que te maldicen. Te maldcimos por las lágrimas y la sangre que has hecho correr. Te maldecimos con todas las maldiciones de todos los que te han maldecido. 
Todos gritan:
¡Nosotros te maldecimos!

Conjuraron a la deidad pagana Istán para transferir las heridas en el cuerpo del muñeco al Hitler original. Todo repetido con una miniatura del dictador y para terminar, decapitaron la figura de Hitler, enterraron el maniquí y los participantes continuaron maldiciendo y bailando con frenesí al ritmo de los tambores.
Un reportero gráfico de la revista LIFE fue testigo de la ceremonia.


Para saber más:

2 comentarios:

  1. Los brujales no se olvidaron ni de ponerse corbata, oye qué elegantes, ¡caray! (jajaja)

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